El Ayuntamiento de Palos de la Frontera, a través de su Concejalía de Nuevas Tecnologías, ha clausurado con notable éxito su reciente taller de Diseño e Impresión 3D para adultos, marcando un hito en su compromiso con la educación y capacitación en tecnologías emergentes. Este curso ha sido diseñado para equipar a los residentes con habilidades valiosas que están en alta demanda en el mercado laboral moderno, preparándolos para los desafíos de las futuras dinámicas de empleo.
El taller se llevó a cabo en el Centro Guadalinfo y se extendió a lo largo del mes de mayo, atrayendo a individuos mayores de 18 años interesados en el campo del diseño 3D. Los participantes se sumergieron en un aprendizaje intensivo que cubrió aspectos fundamentales como el diseño, la croquización, el modelado de sólidos y superficies, y la impresión 3D utilizando software libre. Esta formación no solo proporcionó las bases teóricas, sino que también permitió a los estudiantes experimentar de primera mano con la fabricación aditiva, una habilidad cada vez más solicitada en diversas industrias.
Carmelo Romero, alcalde de Palos de la Frontera, estuvo presente en la ceremonia de clausura y entrega de diplomas, donde destacó la importancia de esta iniciativa. “Nuestra intención es establecer una base sólida para aquellos que deseen especializarse en diseño 3D y técnicas de impresión, orientando la formación hacia las oportunidades laborales del futuro», expresó Romero.
La respuesta positiva de los alumnos ha impulsado a la concejalía a considerar la expansión de su oferta formativa en nuevas tecnologías. Dada la alta demanda y el éxito del programa, se está planificando la implementación de cursos adicionales para seguir fomentando habilidades que no solo son pertinentes en el contexto actual, sino que también serán cruciales en las futuras configuraciones del mercado laboral.
Palos de la Frontera se destaca así por su proactividad en adaptar su oferta educativa a las necesidades cambiantes del entorno laboral y tecnológico, asegurando que sus ciudadanos no solo sean consumidores de tecnología, sino creadores y profesionales capacitados. Este enfoque no solo beneficia a los individuos participantes, sino que también impulsa el desarrollo económico local y fortalece el tejido social mediante la integración de tecnologías avanzadas en la vida cotidiana de la comunidad.