La Guardia Civil de Lepe ha llevado a cabo la detención de un individuo acusado de perpetrar un audaz robo en una residencia privada de la localidad, sustrayendo dos valiosas lámparas antiguas de bronce, piezas datadas de principios del siglo XX. Este suceso, que no solo resalta por la audacia del acto delictivo sino también por la notable antigüedad y valor de los objetos robados, culminó con la recuperación de las lámparas y la devolución al legítimo propietario.
Los hechos se desencadenaron tras la denuncia del propietario de las lámparas, quien notificó a las autoridades la falta de estas piezas históricas. Las investigaciones fueron conducidas por el Área de Investigación de la Guardia Civil de Lepe, quienes iniciaron las pesquisas inmediatamente después de la denuncia interpuesta.
El ladrón había aprovechado la ausencia temporal de los moradores de la vivienda para ejecutar su plan. Según el informe policial, el delincuente forzó una de las rejas de las ventanas para acceder al interior de la casa. Una vez dentro, desmontó cuidadosamente las dos lámparas de araña —una de seis brazos y otra de ocho— para luego proceder a venderlas por piezas al peso en una chatarrería local.
La rápida acción de los agentes permitió localizar las piezas en el establecimiento de chatarra antes de que pudieran ser fundidas o alteradas, facilitando así su identificación y recuperación. Este hecho no solo evidencia la eficacia de las labores de investigación llevadas a cabo por la Guardia Civil, sino también la importancia de la trazabilidad de objetos robados en el mercado.
El detenido ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Ayamonte, donde enfrentará cargos por un delito de robo con fuerza. Las diligencias instruidas subrayan la gravedad del incidente y reafirman el compromiso de las fuerzas del orden con la protección de la propiedad y el patrimonio cultural.
Este incidente resalta la continua vulnerabilidad a la que están expuestas las obras de arte y los objetos antiguos, y refuerza la necesidad de adoptar medidas de seguridad más estrictas para proteger bienes de incalculable valor histórico y cultural.